Tendencia de divorcio en España
El divorcio en España ha experimentado un incremento constante desde que se legalizó en 1981. En la actualidad, más del 60% de las parejas que contraen matrimonio en España acaban divorciándose en algún momento. Este proceso legal ofrece una forma sencilla y accesible para disolver un matrimonio y permitir a ambos miembros volver a casarse si así lo desean.
En España, cualquier pareja casada puede iniciar el procedimiento de divorcio, ya seamos dos españoles, una pareja conformada por un español y un extranjero, o dos extranjeros sin nacionalidad española. Además, si hemos obtenido el divorcio en otro país de la Unión Europea antes de trasladarnos a España, este se reconocerá automáticamente sin necesidad de trámites adicionales.
El procedimiento de divorcio en España es sencillo y puede llevarse a cabo de manera presencial o telemática. Se inicia presentando una demanda de divorcio en el juzgado correspondiente, seguido de una audiencia en la que se ratifican los acuerdos del convenio regulador o se negocian los términos. Una vez que alcanzamos un acuerdo, el juez dicta una sentencia de divorcio que pone fin al matrimonio.
Aquí proporcionamos una guía básica sobre el proceso de divorcio en España y algunos consejos útiles:
- Asesoramiento legal: El primer paso es buscar el asesoramiento de un abogado especializado en derecho de familia. El abogado guiará durante todo el proceso y proporcionará la información necesaria para tomar decisiones informadas.
- Solicitud de divorcio en España: La parte interesada debe presentar una demanda de divorcio ante el Juzgado de Primera Instancia correspondiente al lugar de residencia en Barcelona. La demanda debe incluir los motivos de la separación y las medidas propuestas respecto a los hijos (si los hay), la vivienda familiar, la pensión alimenticia, etc.
- Medidas provisionales: Es posible que se necesite solicitar medidas provisionales durante el proceso de divorcio, como la custodia de los hijos, el uso de la vivienda o el pago de una pensión provisional. Estas medidas se establecen para garantizar la estabilidad y el bienestar de las partes mientras se resuelve el divorcio.
- Negociación o juicio: Una vez presentada la demanda, las partes pueden optar por negociar un acuerdo de divorcio. Esto implica discutir y acordar los términos del divorcio, incluyendo la custodia de los hijos, la distribución de los bienes y otras cuestiones relevantes. Si no se alcanza un acuerdo, el caso puede ir a juicio, y será el juez quien tome las decisiones finales.
- Registro civil: Después de la sentencia de divorcio, se debe inscribir en el Registro Civil correspondiente. Este paso es importante para que el divorcio tenga efectos legales plenos.
Consecuencias Legales
El divorcio en España conlleva diversas consecuencias legales, como el cese de la convivencia, la determinación de la custodia de los hijos, el régimen de visitas, la pensión alimenticia, el uso de la vivienda familiar y la liquidación de los bienes gananciales. Es fundamental tener en cuenta que los bienes adquiridos durante el matrimonio se consideran gananciales en España, lo que significa que pertenecen por igual a ambos cónyuges. En caso de divorcio, estos bienes deben ser liquidados y repartidos equitativamente entre ambas partes.
En el caso de tener hijos menores de edad, estableceremos acuerdos relacionados con la custodia, el régimen de visitas y la pensión alimenticia. En España, reconocemos el derecho de los hijos a mantener una relación equilibrada y regular con ambos progenitores, por lo que establecemos un régimen de visitas que garantice este derecho.
Tipos de Divorcio en España
Existen dos tipos de divorcio en España: el de mutuo acuerdo y el contencioso. El divorcio de mutuo acuerdo es aquel en el que ambos cónyuges estáis de acuerdo en divorciaros y en las medidas que regularán vuestra nueva situación, como la custodia de los hijos, la pensión de alimentos, el uso de la vivienda familiar o la liquidación del régimen económico matrimonial.
Este tipo de divorcio en España tiene muchas ventajas, ya que es más rápido, más barato y menos conflictivo que el contencioso. Además, os permite conservar vuestra autonomía y decidir sobre vuestro futuro sin la intervención del juez.
Para solicitar el divorcio de mutuo acuerdo, necesitaréis un certificado literal de matrimonio, un certificado de nacimiento de los hijos, un certificado de empadronamiento y un convenio regulador. Una vez tengáis toda la documentación, debéis presentar una demanda de divorcio ante el juzgado competente, que será el del último domicilio común o el del domicilio del demandado. El juez examinará la demanda y el convenio regulador y os citará para ratificar vuestra voluntad de divorciaros y vuestra conformidad con las medidas pactadas. Si todo está conforme, el juez dictará una sentencia aprobando el divorcio y el convenio regulador.
Por otro lado, el divorcio contencioso es aquel en el que no hay acuerdo entre los cónyuges. Necesitaréis un certificado literal de matrimonio, un certificado de nacimiento de los hijos, un certificado de empadronamiento y una demanda de divorcio. El juez admitirá la demanda y la notificará al otro cónyuge, y os convocará a una vista oral. Tras la vista oral, el juez dictará una sentencia resolviendo sobre el divorcio y las medidas que se aplicarán tras el mismo.
Conclusión
En conclusión, divorciaros en España no es un proceso sencillo ni agradable, pero puede ser más o menos complicado según el tipo de divorcio que elijáis. Os recomendamos intentar llegar a un acuerdo con la otra parte y optar por el divorcio de mutuo acuerdo. En cualquier caso, es imprescindible contar con la asistencia de un abogado especializado en derecho de familia que pueda asesorar y defender vuestros intereses.
MITJANS ADVOCATS SLP